Con motivo del Día del Libro, este año en la Plaza Luís Mateo Díez se colocaron varios stans por los que el grupo de 1º de Bachillerato de Humanidades, acompañados por su profesora de Latín, anduvieron a la búsqueda de autores clásicos.

No es que fueran muchos los encontrados pero regresamos al aula con Homero y su Odisea, con Virgilio y su Eneida, con Aristófanes y un buen número de sus comedias, con Tristia de Ovidio, con la Conjuración de Catalina de Salustio… y, como no podía ser de otra forma, con los últimos relatos premiados en el certamen de Luís Mateo Díez.

El día 17 de abril a las 8:45 los alumnos de latín del IES "Obispo Argüelles", acompañados de otros alumnos y profesores del Valle de Laciana, pusimos rumbo a Gijón para asistir a las Jornadas de Teatro Grecolatino.

La obra que vimos fue la Aulularia de Plauto, representada por el Grupo Sardiña de Coruña. La obra es una comedia que trata el tema de la codicia: el viejo Euclión encuentra una olla llena de dinero en su casa pero prefiere mantenerla oculta, vivir míseramente, incluso dejar sin dote a su hija, cuya mano ha pedido el también viejo, pero rico, vecino Megadoro, que a su vez es tío de un joven que está enamorado de la joven… El lío surge con la preparación de la boda y su miedo a que le roben el dinero, cosa que finalmente ocurre, aunque gracias a la intervención del joven le es devuelta la olla y para agradecer su recuperación permite que los jóvenes se casen. Lo más divertido fueron las adaptaciones “musicales”, muy actuales y con acento gallego.

Después tuvimos tiempo para comer y a las 3:30 subimos de nuevo al autobús para acercarnos hasta la Villa de Veranes, a 11 kilómetros de Gijón y por la que hicimos un recorrido guiado. Para comenzar, la guía nos felicitó porque un alumno relató la historia de Apolo y Dafne, remontándose al enfrentamiento entre Apolo y Cupido.

Y terminamos la jornada con una hora para recorrer un poco la parte vieja de Gijón y su playa. Eran las 9:30 cuando llegamos a Villablino y con ganas de repetir.

Durante la última semana se ha realizado en el instituto el 2º Mercadillo de libros usados, en el que cualquier miembro de la comunidad educativa podía intercambiar sus libros por otros utilizando un sistema de vales que entregaban las profesoras del Departamento de Lengua.

Todos los libros eran expuestos en la biblioteca del centro durante los recreos, para que los interesados realizaran el intercambio, pudiendo elegir entre un gra número de obras tanto juveniles como para un público más adulto.

Como ya ocurriera el curso pasado la actividad ha sido un éxito y muchos alumnos han podido intercambiar sus libros incluso de idiomas, favoreciendo con esta manera de intercambio a los alumnos con menores recursos económicos.

En las últimas semanas los alumnos de 1º de bachillerato del instituto han organizado un ciclo de cine en blanco y negro para recaudar dinero para el viaje de fin de estudios.

Se realizaron cuatro proyecciones en las que se han visionado las siguientes películas: Casablanca, Psicosis, La leyenda del indomable y The Artist.

El viernes día 1 de febrero, un grupo de 17 alumnos continuamos nuestra jornada en el IES Obispo Argüelles, para seguir un curso de formación de alumnos ayudantes unos, y otro grupo, que ya son ayudantes desde el curso pasado, asistieron al curso de formación de  mediadores.

Tras las actividades de presentación y cohesión del grupo, a las 21 horas todos pasamos a la cafetería para ayudar entre todos a preparar y degustar una agradable cena, a la que, después de una breve sobremesa, siguió una “peli con palomitas” y una elaboración y colocación de carteles. Y ¡a dormir!, aunque lo que predominó fue la charla con nuestros compis de cama, para disgusto de Noelia en la habitación de chicas y Toño y Pomi en la de chicos.

El sábado 2, lo primero fue el desayuno, saludable como piden nuestros profes, y a partir de las 10 seguimos con nuestras actividades formativas, unos de ayudantes con Noelia y Pilar y otros de mediadores con Mª Jesús y Pablo. Solo cortamos las actividades para comer una estupenda paella que Pablo con sus “pinches” nos habían preparado.

La hora para continuar resultaba un poco dura, por aquello de que después de comer… el sueño nos persigue. Pero retomamos con las fuerzas que nos quedaban para llegar con éxito a concluir nuestro curso al que pusieron la guinda con la entrega de diplomas a las 19 horas y un pincheo de “buena convivencia” entre profes, padres y alumnos.